Apresura primavera
que se acerca Santa Cruz
y en el cielo hay poca luz
y no aumenta la pradera.
Se han helado los frutales
con el hielo pertinaz
y con frío y sequedad
tristes están los trigales.
Salió el cuco dando quejas
con su machacón 'tu tu'
y dijo al grillo: canta tu
que yo me vuelvo a mis tejas.
¿'Com-pa-ñe-ro, tie-nes-ro-pa'?,
gimió el sapo campanero
preguntando al compañero.
Yo-no, ¿y-tu?: Po-ca, po-ca.
Flojos van los manantiales
y se pierde la esperanza,
sin nubes en lontananza,
de que aumenten los caudales.
Se han secado los charcales (sic)
donde alimento buscaban
y sus patas se lavaban
las cigüeñas patriarcales.
No se augura buen futuro
si no se corrige el mal,
porque no habrá buen final
cuando acaba prematuro.
Apresura primavera.
Haz que con lluvia y calor
surja el grano de la flor.
No abortes la sementera.
Apresura primavera.
Da a la campiña color
con periodos de calor
y con lluvias placenteras.
(*) Faustino Parriego, Santa Clara Avedillo (Zamora), 1957
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